viernes, 28 de octubre de 2011
AJUSTANDO LOS LIBROS A LOS LECTORES
Esta sí que es una noticia llamativa: el célebre escritor Umberto Eco procederá a reescribir su obra "El nombre de la rosa", con la finalidad de hacerla "accesible" a los nuevos lectores.
Al parecer, aligerará ciertos pasajes y tratará de emplear un vocabulario más accesible y menos variado en esta nueva edición. Por lo menos, esa es la idea que ha esgrimido la editorial Bompiani en sus comunicados para explicar el próximo lanzamiento.
Si esto responde a una movida comercial, no me parece buena idea. Y si de veras constituye una necesidad de ajustar los libros a los lectores actuales, no sólo no me agrada sino que me parece preocupante. Porque entonces hay que admitir que un libro como éste, que fue éxito de ventas en 1980, ya no puede ser comprendido en su totalidad por gran parte de los lectores en 2011.
¿Será verdad?
