jueves, 1 de mayo de 2014

ANATOMIA HUMANA I: APARATO DIGESTIVO

1. GENERALIDADES

El aparato digestivo o sistema digestivo es el conjunto de organos encargados del proceso de la digestion, es decir, la transformación de los alimentos para que puedan ser absorbidos y utilizados por las celulas del organismo.

La función que realiza es la de transporte (alimentos), secreción (jugos digestivos), absorción (nutrientes) y excreción (mediante el proceso de defecación).

El proceso de la digestión es el mismo en todos los animales monogástricos: transformar los glucidos, lipidos y proteinas en unidades más sencillas, gracias a las enzimas digestivas, para que puedan ser absorbidas y transportadas por la sangre.


2. FUNCIONES

Desde la boca hasta el ano, el tubo digestivo mide unos once metros de longitud. En la boca empieza propiamente la digestión. Los dientes trituran los alimentos y las secreciones de las glandulas salivales los humedecen e inician su descomposicion quimica transformándose en el bolo alimenticio. Luego, el bolo alimenticio cruza la faringe, sigue por el esofago y llega al estomago, una bolsa muscular de litro y medio de capacidad, en condiciones normales, cuya mucosa segrega el potente jugo gastrico, en el estómago, el alimento es agitado hasta convertirse en el quimo.

A la salida del estómago, el tubo digestivo se prolonga con el intestino delgado, de unos seis metros de largo, aunque muy replegado sobre sí mismo. En su primera porción o duodeno recibe secreciones de las glándulas intestinales, la bilis y los jugos del pancreas. Todas estas secreciones contienen una gran cantidad de enzimas que degradan los alimentos y los transforman en sustancias solubles simples.

El tubo digestivo continúa por el intestino grueso, de algo más de metro y medio de longitud. Su porción final es el recto, que termina en el ano, por donde se evacuan al exterior los restos indigeribles de los alimentos.


3. ESTRUCTURA



El tubo digestivo, es un órgano llamado también conducto alimentario o tracto gastrointestinal, presenta una sistematización prototípica, comienza en la boca y se extiende hasta el ano. Su longitud en el hombre es de 10 a 12 metros, siendo seis o siete veces la longitud total del cuerpo.

En su trayecto a lo largo del tronco del cuerpo, discurre por delante de la columna vertebral. Comienza en la cara, desciende luego por el cuello, atraviesa las tres grandes cavidades del cuerpo: torácica, abdominal y pélvica. En el cuello está en relación con el conducto respiratorio, en el tórax se sitúa en el mediastino posterior entre los dos pulmones y el corazón, y en el abdomen y pelvis se relaciona con los diferentes órganos del aparato genitourinario.

El tubo digestivo procede embriológicamente del endodermo, al igual que el aparato respiratorio. El tubo digestivo y las glándulas anexas (glándulas salivales, hígado y páncreas), forman el aparato digestivo.

Histológicamente está formado por cuatro capas concéntricas que son de adentro hacia afuera:

a. Capa interna o mucosa (donde pueden encontrarse glándulas secretoras de moco y HCl, vasos linfáticos y algunos nódulos linfoides). Incluye una capa muscular interna o muscularis mucosae compuesta de una capa circular interna y una longitudinal externa de músculo liso.
b. Capa submucosacompuesta de tejido conectivo denso irregular fibroelástico. La capa submucosa contiene el llamado plexo submucoso de Meissner, que es un componente del sistema nervioso entérico y controla la motilidad de la mucosa y en menor grado la de la submucosa, y las actividades secretorias de las glándulas.
c. Capa muscular externa, compuesta al igual que la muscularis mucosae, por una capa circular interna y otra longitudinal externa de músculo liso (excepto en el esófago, donde hay músculo estriado). Esta capa muscular tiene a su cargo los movimientos peristálticos que desplazan el contenido de la luz a lo largo del tubo digestivo. Entre sus dos capas se encuentra otro componente del sistema nervioso entérico, el plexo mientérico de Auerbach, que regula la actividad de esta capa.
d. Capa serosa o adventicia. Se denomina según la región del tubo digestivo que reviste, como serosa si es intraperitoneal o adventicia si es retroperitoneal. La adventicia está conformada por un tejido conectivo laxo. La serosa aparece cuando el tubo digestivo ingresa al abdomen, y la adventicia pasa a ser reemplazada por el peritoneo.

Los plexos submucoso y mientérico constituyen el sistema nervioso entérico que se distribuye a lo largo de todo el tubo digestivo, desde el esófago hasta el ano.

Por debajo del diafragma, existe una cuarta capa llamada serosa, formada por el peritoneo.

El bolo alimenticio pasa a través del tubo digestivo y se desplaza así, con ayuda tanto de secreciones como de movimiento peristáltico que es la elongación o estiramiento de las fibras longitudinales y el movimiento para afuera y hacia adentro de las fibras circulares. A través de éstos el bolo alimenticio puede llegar a la válvula cardial que conecta directamente con el estómago.

Si el nivel de corte es favorable, se pueden ver los mesos. El peritoneo puede presentar subserosa desarrollada, en especial en la zona del intestino grueso, donde aparecen los apéndices epiploicos.

Según el sector del tubo digestivo, la capa muscular de la mucosa puede tener sólo músculo longitudinal o longitudinal y circular.

La mucosa puede presentar criptas y vellosidades, la submucosa puede presentar pliegues permanentes o pliegues funcionales. El pliegue funcional de la submucosa es posible de estirar, no así la válvula connivente.

El grosor de la pared cambia según el lugar anatómico, al igual que la superficie, que puede ser lisa o no. El epitelio que puede presentarse es un plano pluriestratificado no cornificado o un prismático simple con microvellosidades.

En las criptas de la mucosa desembocan glándulas. Éstas pueden ser de la mucosa o de la submucosa. En tanto, una vellosidad es el solevantamiento permanente de la mucosa. Si el pliegue es acompañado por la submucosa, entonces el pliegue es de la submucosa.

El pliegue de la mucosa y submucosa es llamado válvula connivente o pliegue de Kerckring. La válvula connivente puede mantener la presencia de vellosidades. La válvula connivente es perpendicular al tubo digestivo, y solo se presenta en el intestino delgado.
 

4. COMPONENTES

a. Boca

La cavidad bucal está dividida por las arcadas gingivodentarias en dos partes, una periférica o vestíbulo de la boca, y otra central, o cavidad bucal propiamente tal.

Dentro del vestíbulo de la boca, en su pared externa, destacan los orificios de drenaje de los ductos parotideos o de Stenon, a la altura del cuello de los primeros o segundos molares.
Figura 1.1:
Anatomía de las glándulas salivales
La cavidad bucal está limitada hacia delante y hacia los lados por las arcadas gingivodentarias, hacia arriba por la bóveda palatina y hacia abajo por el piso de la boca. Hacia atrás, se comunica con la faringe por un orificio circunscrito por el velo del paladar, los pilares anteriores del velo y la base de la lengua llamado istmo de las fauces.
En la bóveda palatina se pueden distinguir dos partes: una anterior o paladar duro, y una posterior o paladar blando. En el paladar duro es posible encontrar en el tercio medial y anterior, un orificio llamado foramen incisivo, que marca el límite del paladar primitivo, a través del cuál pasan el nervio y arteria Esfenopalatina.. Bajo la mucosa del paladar duro a la altura del segundo molar, un centímetro hacia medial, se encuentra el orificio palatino mayor, en donde emergen los vasos y el nervio palatino mayor. El borde posterior del paladar duro se continúa con el paladar blando. Este último es un tabique músculo-membranoso que prolonga la bóveda palatina hacia atrás y abajo, y separa la nasofaringe de la orofaringe. El borde posterior del paladar blando presenta en su parte media una prolongación de 10 a 15mm de longitud, la úvula, y a cada lado, dos repliegues curvilíneos, uno anterior y otro posterior, llamadospilares anteriores y posteriores del velo del paladar. Dichos pilares contribuyen a limitar la fosa amigdalina, cuya mitad superior está ocupada por la amígdala palatina.
Figura 1.2:
Anatomía cavidad bucal
La amígdala palatina está rodeada por un tejido más denso, que forma la cápsula amigdalina. La cara medial de la amígdala es mamelonada y tiene en su superficie la desembocadura de las criptas amigdalinas.
En el piso de la boca encontramos el frenillo, que es un pliegue mucoso que une la cara dorsal de la lengua con la mucosa del piso de la boca. A cada lado del frenillo se produce una elevación, el pliegue sublingual, bajo el cual esta glándula sublingual. También destaca el orificio del conducto submandibular o de Wharton que se abre en la carúncula o papila sublingual, a cada lado del frenillo.
Figura 1.3:
Anatomía del piso de la boca
La lengua ocupa la parte media del piso de la boca. Su cara superior está dividida en dos partes, una anterior o bucal y otra posterior o faríngea, por un surco en forma de V abierta hacia delante llamada surco terminal o V lingual.
La parte faríngea de la cara dorsal de la lengua presenta pequeñas prominencias dispuestas oblicuamente, que son debidas a la presencia en la capa superficial de la mucosa de folículos cuyo conjunto constituye las papilas de la V lingual. y el foramen caecum, que es el remanente del conducto Tirogloso. En el tercio posterior se encuentran las amígdalas linguales.
Hay diferentes tipos de papilas linguales que se distribuyen característicamente en la superficie de la lengua. Las papilas filiformes contienen aferencias táctiles, son abundantes, rugosas, con forma de filamento y se ubican en la región central. Las fungiformes, son pequeñas y tienen forma de hongo, se observan como manchas rojizas a la inspección. Las caliciformes son las de mayor tamaño y están ubicadas por delante del surco terminal, ellas están rodeadas por una depresión profunda que posee abundantes cálices gustatorios. Las foliáceas están hacia los bordes laterales y en el ser humano no están muy desarrolladas. Las circunvaladas, foliáceas y fungiformes contienen receptores para el gusto en los calículos gustatorios.
Figura 1.4:
Anatomía de la lengua
La inervación motora de la lengua procede del nervio Hipogloso(XII) y del Glosofaríngeo(IX). La sensación del gusto de los dos tercios anteriores es conducida por la cuerda del tímpano, rama del nervio Facial(VII), y la del tercio posterior, por los nervios Glosofaríngeo y Vago(X). La sensibilidad lingual está dada por la rama lingual de la división mandibular del Trigémino(V) y los nervios Glosofaríngeo y Laríngeo interno.


b. Esófago


El esófago es un conducto o músculo membranoso que se extiende desde la faringe hasta el estómago. De los incisivos al cardias (porción donde el esófago se continua con el estómago) hay unos 40 cm. 

El esófago empieza en el cuello, atraviesa todo el tórax y pasa al abdomen a través del orificio esofágico del diafragma. Habitualmente es una cavidad virtual (es decir que sus paredes se encuentran unidas y solo se abren cuando pasa el bolo alimenticio). 

El esófago alcanza a medir 25 cm y tiene una estructura formada por dos capas de músculos, que permiten la contracción y relajación en sentido descendente del esófago. Estas ondas reciben el nombre de movimientos peristálticos y son las que provocan el avance del alimento hacia el estómago. Es sólo una zona de paso del bolo alimenticio, y es la unión de distintos orificios, el bucal, el nasal, los oídos y la laringe.


Se encuentra situado en el espacio retrotorácico (la parte más posterior del tórax), por delante de las vértebras, estando a lo largo de todo el trayecto, en íntima relación con distintas estructuras (aorta, tráquea, bronquio principal izquierdo, corazón y diafragma).


El esófago se une con el estómago (unión gastro-esofágica) por debajo del diafragma. En esa zona se sitúa un esfínter (cardias) que impide que el contenido del estómago retroceda al esófago y evita que los ácidos gástricos lesionen la mucosa esofágica.Cuando el funcionamiento del cardias se altera, aparece un reflujo gastroesofágico, que se acompaña de acidez y dolor en la zona.
 
El esófago una pared interna mucosa o pared interna del esófago, rodeada de varias capas musculares, la interna y la externa que son las que actúan movilizando el contenido alimenticio haciendo que avance hacia el estómago.

Una vez que el alimento se encuentra dentro del esófago, éste se contrae, gracias a sus capas musculares, produciendo una serie de movimientos llamados peristálticos, que impulsan su contenido hasta el estómago.


c. Estómago

El estómago es un órgano en el que se acumula comida. Varía de forma según el estado de repleción (cantidad de contenido alimenticio presente en la cavidad gástrica) en que se halla, habitualmente tiene forma de J. Consta de varias partes que son: fundus, cuerpo, antro y píloro. Su borde menos extenso se denomina curvatura menor y la otra, curvatura mayor. El cardias es el límite entre el esófago y el estómago y el píloro es el límite entre el estómago y el intestino delgado. En un individuo mide aproximadamente 25 cm del cardias al píloro y el diámetro transverso es de 12 cm.

Es el encargado de hacer la transformación química ya que los jugos gástricos transforman el bolo alimenticio que anteriormente había sido transformado mecánicamente (desde la boca).

En su interior encontramos principalmente dos tipos de células, las células parietales, las cuales secretan el ácido clorhídrico (HCl) y el factor intrínseco, una glucoproteína utilizada en la absorción de vitamina B12 en el intestino delgado; además contiene las células principales u Oxínticas las cuales secretan pepsinógeno, precursor enzimático que se activa con el HCl formando 3 pepsinas cada uno.

La secreción de jugo gástrico está regulada tanto por el sistema nervioso como el sistema endocrino, proceso en el que actúan: la gastrina, la colecistoquinina (CCK), la secretina y el péptido inhibidor gástrico (PIG).

En el estómago se realiza la digestión de:

    Proteínas (principalmente pepsina).
    Lípidos.
    No ocurre la digestión de carbohidratos.
   
 Otras funciones del estómago son la eliminación de la flora bacteriana que viene con los alimentos por acción del ácido clorhídrico.
 

El estómago es una porción dilatada del tubo digestivo con forma de jota que varía de una persona a otra y según la postura.
 
Los alimentos una vez deglutidos, pasan al esófago (tubo largo y delgado que transporta los alimentos) y de éste al estómago. Tras éste empieza el largo intestino delgado, seguido del intestino grueso, recto y finalmente, el ano.

El estómago se sitúa en la parte alta del abdomen.  Por su localización tiene unas relaciones anatómicas muy complejas e importantes en el hígado, con la vía biliar, con el colon transverso y con el páncreas, órgano que se sitúa por detrás del estómago.

Las partes que se consideran en el estómago son:
  • FUNDUS: inmediatamente después del cardias o zona de unión con el esófago.
  • CUERPO
  • ANTRO: antes del final del estómago (el píloro).
El estómago posee dos esfínteres:
  • El cardias: que separa el estómago del esófago. Impide que el contenido del estómago vuelva al esófago (reflujo gastroesofágico).
  • El píloro: separa el estómago de la primera porción del intestino delgado, el duodeno.

El estómago presenta dos curvaturas, una mayor dirigida hacia la izquierda y otra menor dirigida hacia la derecha.

El interior del estómago está cubierto por una mucosa con muchos pliegues. Esta mucosa contiene multitud de glándulas que se encargan de producir una serie de sustancias (enzimas) que continúan el proceso de la digestión que se inició con la masticación.

Rodeando a esta capa se encuentra la submucosa, que a su vez está recubierta por una capa muscular, constituida por múltiples fibras que le confieren resistencia y permiten la mezcla de los alimentos. Su exterior está recubierto por una membrana denominada serosa o peritoneo.

d. Páncreas

Es una glándula íntimamente relacionada con el duodeno, es de origen mixto, segrega hormonas a la sangre para controlar los azúcares y jugo pancreático que se vierte al intestino a través del conducto pancreático, e interviene y facilita la digestión, sus secreciones son de gran importancia en la digestión de los alimentos.

El páncreas es un órgano alargado, cónico, localizado transversalmente en la parte dorsal del abdomen, detrás del estómago. El lado derecho del órgano (llamado cabeza del páncreas) es la parte más ancha y se encuentra en la curvatura del duodeno (la primera porción del intestino delgado). La parte cónica izquierda (llamada cuerpo del páncreas) se extiende ligeramente hacia arriba y su final (llamado cola) termina cerca del bazo.
El páncreas está formado por dos tipos de tejidos:
  • El tejido exocrino.
    El tejido exocrino secreta enzimas digestivas. Estas enzimas son secretadas en una red de conductos que se unen al conducto pancreático principal, que atraviesa el páncreas en toda su longitud.
  • El tejido endocrino.
    El tejido endocrino, que está formado por los islotes de Langerhans, secreta hormonas en el torrente sanguíneo.
El páncreas tiene funciones digestivas y hormonales:
  • Las enzimas secretadas por el tejido exocrino del páncreas ayudan a la degradación de carbohidratos, grasas, proteínas y ácidos en el duodeno. Estas enzimas son transportadas por el conducto pancreático hacia el conducto biliar en forma inactiva. Cuando entran en el duodeno, se vuelven activas. El tejido exocrino también secreta un bicarbonato para neutralizar el ácido del estómago en el duodeno.
  • Las hormonas secretadas en el páncreas por el tejido endocrino son la insulina y el glucagón (que regulan el nivel de glucosa en la sangre) y la somatostatina (que previene la liberación de las otras dos hormonas).

e. Hígado

El hígado es la mayor víscera del cuerpo. Pesa 1500 gramos. Consta de cuatro lóbulos, derecho, izquierdo, cuadrado y caudado; los cuales a su vez se dividen en segmentos. 

Las vías biliares son las vías excretoras del hígado, por ellas la bilis es conducida al duodeno. Normalmente salen dos conductos: derecho e izquierdo, que confluyen entre sí formando un conducto único. El conducto hepático, recibe un conducto más fino, el conducto cístico, que proviene de la vesícula biliar alojada en la cara visceral de hígado. De la reunión de los conductos císticos y el hepático se forma el colédoco, que desciende al duodeno, en el que desemboca junto con el conducto excretor del páncreas. 

La vesícula biliar es una víscera hueca pequeña. Su función es la de almacenar y concentrar la bilis segregada por el hígado, hasta ser requerida por los procesos de la digestión. En este momento se contrae y expulsa la bilis concentrada hacia el duodeno. Es de forma ovalada o ligeramente piriforme y su diámetro mayor es de unos 5 a 8 cm.

El hígado está situado en la parte superior derecha de la cavidad abdominal, debajo del diafragma y por encima del estómago, el riñón derecho y los intestinos. El hígado tiene forma cónica, es de color marrón rojizo oscuro y pesa alrededor de 3 libras.
La sangre que llega al hígado proviene de las dos fuentes que se indican a continuación:
  • La sangre oxigenada llega al hígado a través de la arteria hepática.
  • La sangre rica en nutrientes llega a través de la vena porta hepática.
El hígado recibe permanentemente alrededor de una pinta de sangre (el 13 por ciento de la sangre total del cuerpo). El hígado consta de dos lóbulos principales que a su vez están formados por miles de lobulillos. Estos lobulillos se conectan con pequeños conductos que a su vez están conectados con conductos más grandes que finalmente forman el conducto hepático. El conducto hepático transporta la bilis producida por las células del hígado hacia la vesícula biliar y el duodeno (la primera parte del intestino delgado).

El hígado puede perder tres cuartos del total de sus células antes de dejar de funcionar. Además, el hígado es el único órgano del cuerpo que tiene la capacidad de autorregenarse.

El hígado regula los niveles sanguíneos de la mayoría de los compuestos químicos y excreta un producto llamado bilis, que ayuda a eliminar los productos de desecho del hígado. Toda la sangre que sale del estómago y los intestinos pasa a través del hígado. El hígado procesa esta sangre y descompone los nutrientes y drogas en formas más fáciles de usar por el resto del cuerpo. Se han identificado más de 500 funciones vitales relacionadas con el hígado. Entre las funciones más conocidas se incluyen las siguientes:
  • La producción de bilis, que ayuda a eliminar los desechos y a descomponer las grasas en el intestino delgado durante la digestión.
  • La producción de determinadas proteínas del plasma sanguíneo.
  • La producción de colesterol y proteínas específicas para el transporte de grasas a través del cuerpo.
  • La conversión del exceso de glucosa en glucógeno de almacenamiento (glucógeno que luego puede ser convertido nuevamente en glucosa para la obtención de energía).
  • La regulación de los niveles sanguíneos de aminoácidos, que son las unidades formadoras de las proteínas.
  • El procesamiento de la hemoglobina para utilizar su contenido de hierro (el hígado almacena hierro).
  • La conversión del amoníaco tóxico en urea (la urea es un producto final del metabolismo proteico y se excreta en la orina).
  • La depuración de la sangre de drogas y otras sustancias tóxicas.
  • La regulación de la coagulación sanguínea.
  • La resistencia a las infecciones mediante la producción de factores de inmunidad y la eliminación de bacterias del torrente sanguíneo.
Cuando el hígado degrada sustancias nocivas, los subproductos se excretan hacia la bilis o la sangre. Los subproductos biliares entran en el intestino y finalmente se eliminan del cuerpo en forma de heces. Los subproductos sanguíneos son filtrados por los riñones y se eliminan del cuerpo en forma de orina.

VESÍCULA BILIAR
Órgano de forma ovoide y hueco, que se ubica algo oculto por debajo del hígado. Sus paredes poseen una serosa, una capa muscular y una mucosa con pliegues similares a las del estómago. La vesícula biliar se comunica con el duodeno a través del conducto colédoco. Tiene por función acumular toda la bilis producida por el hígado.




f. Intestino delgado

El intestino delgado comienza en el duodeno (tras el píloro) y termina en la válvula ileocecal, por la que se une a la primera parte del intestino grueso. Su longitud es variable y su calibre disminuye progresivamente desde su origen hasta la válvula ileocecal y mide de 6 a 7 metros de longitud.

En el intestino delgado se absorben los nutrientes de los alimentos ya digeridos. El tubo está repleto de vellosidades que amplían la superficie de absorción.

El duodeno, que forma parte del intestino delgado, mide unos 25-30 cm de longitud; el intestino delgado consta de una parte próxima o yeyuno y una distal o íleon; el límite entre las dos porciones no es muy aparente. El duodeno se une al yeyuno después de los 30 cm a partir del píloro.

El yeyuno-íleon es una parte del intestino delgado que se caracteriza por presentar unos extremos relativamente fijos: El primero que se origina en el duodeno y el segundo se limita con la válvula ileocecal y primera porción del ciego. Su calibre disminuye lenta pero progresivamente en dirección al intestino grueso. El límite entre el yeyuno y el íleon no es apreciable. El intestino delgado presenta numerosas vellosidades intestinales que aumentan la superficie de absorción intestinal de los nutrientes y de las proteínas. Al intestino delgado, principalmente al duodeno, se vierten una diversidad de secreciones, como la bilis y el jugo pancreático.

 Es la porción del tracto digestivo que se ubica entre el estómago y el ciego. Empieza en el esfínter pilórico y termina en el esfínter ileocecal. El intestino delgado tiene una longitud aproximada de 6-7 metros, y un grosor cercano a los 3 centímetros. De afuera hacia adentro, el intestino delgado presenta cuatro estructuras:
-Una serosa que cubre la pared

-Dos capas musculares (longitudinal y circular)

-Una submucosa

-Una mucosa con gran capacidad de absorción, ya que posee numerosos pliegues que emiten proyecciones hacia la luz, llamadas vellosidades intestinales.
Cada vellosidad tiene 0,5-1 milímetro de altura. Por cada milímetro cuadrado de mucosa intestinal se disponen 30-40 vellosidades. Estas estructuras disminuyen en cantidad hacia el recto.

Las vellosidades intestinales están formadas por células de epitelio cilíndrico simple, con gran cantidad de microvellosidades hacia el lumen.

El intestino delgado tiene gran cantidad de glándulas que producen mucus, dispuestas entre las vellosidades. Estas glándulas, que aumentan su cantidad desde el duodeno hacia el recto, protegen la mucosa intestinal.

El intestino delgado se divide en duodeno, yeyuno e íleon.

DUODENO
Porción corta y fija, en forma de C. Se ubica entre el esfínter pilórico (píloro) y el yeyuno. En el duodeno desembocan el conducto pancreático (transporta el jugo pancreático elaborado por el páncreas) y el conducto colédoco (vuelca la bilis procedente de la vesícula biliar).


YEYUNO-ÍLEON
Porción larga y móvil, ubicada entre el duodeno y el ciego. El yeyuno posee más vellosidades que el íleon y un diámetro de 3 cm. El íleon desemboca en el ciego a través de la válvula (esfínter) ileocecal. 

 Tiene un diámetro de 2 cm. Las funciones del intestino delgado son:
 
-Continuar con la digestión del quimo procedente del estómago.
-Absorber los nutrientes que serán luego transportados hacia todas las células del organismo vía sanguínea.
Tal como sucede en el estómago, el intestino delgado realiza una digestión de tipo física y química.
Digestión física
: mediante la contracción de los músculos, que ayudan a mezclar el quimo con los jugos digestivos y favorecer el contacto con las vellosidades. El intestino realiza dos tipos de movimientos:

-Movimientos peristálticos, mediante los músculos longitudinales que realizan movimientos de contracción para el tránsito del quimo.


-Movimientos de segmentación a cargo de los músculos circulares, que realizan contracciones rítmicas sin progresión.

Mediante la digestión física, los movimientos intestinales contribuyen a mezclar los jugos intestinales con el quimo. Además, favorecen el contacto del quimo con las vellosidades intestinales para permitir la absorción de nutrientes.
Digestión química
: se lleva a cabo por la acción del jugo pancreático, la bilis y el jugo intestinal, que actúan sobre el quimo. La función del jugo pancreático es aportar enzimas para degradar los hidratos de carbono, los lípidos y las proteínas. Los jugos intestinales aportan enzimas que continúan con la degradación de hidratos de carbono y de proteínas, mientras que la bilis emulsiona las grasas.


COMPOSICIÓN DEL JUGO PANCREATICO
Está compuesto por agua y bicarbonato. Además posee las siguientes enzimas:
-Tripsinógeno: es un precursor inactivo. Por acción de la enteroquinasa intestinal actúa sobre la tripsina, para que ésta desdoble las proteínas a aminoácidos.

-Amilasa pancreática: actúa sobre los hidratos de carbono y los transforma en disacáridos

-Lipasa pancreática: actúa sobre las grasas desdoblándolas en ácidos grasos y glicerol.


COMPOSICIÓN DEL JUGO INTESTINAL

Posee agua, bicarbonato, mucina, sales minerales y enzimas. Entre estas últimas se destacan:

-Dipeptidasas: Actúan sobre los dipéptidos transformándolos en aminoácidos.
-Disacaridasas: Actúa sobre los disacáridos y los convierte en monosacáridos.-Enteroquinasa: Desdobla el tripsinógeno del páncreas en tripsina, que degrada las proteínas.
En el intestino delgado se produce la absorción de la mayor cantidad de nutrientes a través de las vellosidades intestinales. Esos nutrientes pasan a los capilares sanguíneos y linfáticos y se dirigen al hígado, para luego distribuirse a todas las células del organismo.


g. Intestino grueso

El intestino grueso se inicia a partir de la válvula ileocecal en un fondo de saco denominado ciego de donde sale el apéndice vermiforme y termina en el recto. Desde el ciego al recto describe una serie de curvas, formando un marco en cuyo centro están las asas del yeyuno íleon. Su longitud es variable, entre 120 y 160 cm, y su calibre disminuye progresivamente, siendo la porción más estrecha la región donde se une con el recto o unión rectosigmoidea donde su diámetro no suele sobrepasar los 3 cm, mientras que el ciego es de 6 o 7 cm.

Tras el ciego, la del intestino grueso es denominada como colon ascendente con una longitud de 15 cm, para dar origen a la tercera porción que es el colon transverso con una longitud media de 50 cm, originándose una cuarta porción que es el colon descendente con 10 cm de longitud. Por último se diferencia el colon sigmoideo, recto y ano. El recto es la parte terminal del tubo digestivo.

 Tiene una longitud de 1,5 metros y es la porción final del sistema digestivo. Está separado del intestino delgado a través del esfínter ileocecal. Cuando se distiende la porción final del íleon, el esfínter íleocecal se relaja el quimo ingresa en el intestino grueso.
De afuera hacia adentro, el intestino grueso presenta cuatro estructuras:

-Una serosa que cubre la pared

-Dos capas musculares, una longitudinal y otra circular

-Una submucosa
-Una mucosa, con muchos nódulos linfáticos
La mucosa del intestino grueso no posee vellosidades intestinales. Las fibras musculares longitudinales forman bandas llamadas tenias, que van desde el ciego al recto. Entre las tenias se ubican las haustras, dilataciones con forma de saco separadas por pliegues semilunares.
El intestino grueso recibe el quimo del íleon. Su principal función es concentrar y almacenar los desechos sólidos y transformar el quimo en materia fecal. Las células presentes en la mucosa colónica reabsorben agua del quimo, sales minerales y algunas vitaminas.
El intestino grueso se divide en tres porciones: ciego, colon y recto.

CIEGO
El ciego es la primera porción del intestino grueso, situado entre el esfínter ileocecal y el colon ascendente. Tiene forma de saco y mide entre 5 y 7 cm de longitud. En su parte inferior se proyecta el apéndice vermiforme o cecal.

 
APÉNDICE VERMIFORME
Es una prolongación de forma tubular que se encuentra adherida al ciego. Tiene una longitud de 10 centímetros en adultos y un diámetro de 7 - 8 milímetros. El apéndice vermiforme (o apéndice cecal) se aloja en el cuadrante inferior derecho del abdomen. Carece de una función significativa.

La inflamación del apéndice vermiforme (apendicitis) es la dolencia más común de este órgano del sistema digestivo. El punto de Mc Burney, muy sensible a la presión en casos de apendicitis, se ubica entre el tercio externo y el tercio medio de una línea que va desde el ombligo hasta la espina ilíaca antero-superior (flecha).
COLONSe ubica entre el ciego y el recto. Se divide en cuatro regiones: colon ascendente, colon transverso, colon descendente y colon sigmoide.
-Colon ascendente (12-20 cm de longitud)
Se ubica a la derecha del abdomen, y se prolonga hasta la cara inferior del hígado, donde se acoda.
 
-Colon transverso (40-50 cm de largo)
Atraviesa el abdomen y se dobla al llegar al bazo.

-
Colon descendente (30 cm)
Desciende sobre el lado izquierdo del abdomen, inclinándose hacia la línea media.

-
Colon sigmoide (40 cm)
Posee potentes músculos que empujan la materia fecal hacia el recto.

RECTO
El recto es la última porción del sistema digestivo, ubicado entre el colon sigmoide y el ano. Tiene una longitud aproximada de 20 cm. La función del recto es almacenar la materia fecal para ser expulsada luego por la abertura anal. El recto se extiende hasta el ano, abertura que tiene un esfínter interno de células musculares lisas y un esfínter externo de músculo estriado.

FLORA INTESTINAL
Formada por un grupo de bacterias que viven normalmente en el intestino y benefician al organismo, evitando enfermedades. Ayudan en la absorción de algunos nutrientes y son necesarias para la síntesis de vitamina K. La flora bacteriana se renueva en forma constante. El intestino del recién nacido es estéril.


MECANISMO DE ABSORCIÓN DE NUTRIENTES
-AGUA
Es absorbida por ósmosis en el estómago e intestinos.

-MINERALES
El sodio, calcio, magnesio, hierro y otros minerales se absorben por transporte activo.

-VITAMINAS
Las vitaminas hidrosolubles, complejo B y vitamina C, se absorben por difusión pasiva. Las vitaminas A, D, E y K (liposolubles) se absorben mediante pinocitosis.

-HIDRATOS DE CARBONO
La glucosa y la galactosa se absorben por transporte activo, mientras que la fructosa lo hace por difusión facilitada. Estos tres monosacáridos son absorbidos en la porción final del íleon.

-LÍPIDOS
Emulsionadas por las sales biliares en pequeñas gotitas, atraviesan las vellosidades intestinales por difusión simple. Pasan a los vasos linfáticos y de ahí a la circulación general, sin pasar por la circulación portal.

-PROTEÍNAS
Los aminoácidos se absorben por difusión simple, facilitada o por transporte activo. La absorción tiene lugar en el intestino delgado. Ingresados a las células mucosas del intestino, los aminoácidos son transportados al hígado por la vena porta, y de ahí a las células de todo el organismo.


REFLEJO DE LA DEFECACIÓN
Cuando la materia fecal ingresa en el recto provoca distensión de sus paredes, hecho que desencadena el reflejo de la defecación. El aumento de presión en las paredes del recto es captado por receptores que envían señales a la médula y producen:
-Aumento de contracciones en el colon sigmoideo

-Relajación del esfínter anal interno

-Contracciones de la musculatura abdominal
.
Al tener fibras musculares estriadas, el esfínter anal externo no participa en el reflejo de la defecación.


La materia fecal está compuesta por agua (75%) y por sólidos (25%), donde se incluyen restos no digeridos, fibra alimentaria (celulosa, lignina), sustancias no absorbidas (grasas, aminoácidos), desechos celulares y bacterianos, y compuestos de la bilis (estercobilina, responsable de su color), enzimas y gases.
En síntesis, en el sistema digestivo los alimentos sufren los procesos de: -INGESTIÓN: cavidad bucal.
-DIGESTIÓN: cavidad bucal, estómago y duodeno.

-ABSORCIÓN: yeyuno, íleon.

-EGESTIÓN: colon y recto.